la vida es un juego

A veces creemos que la vida es un juego para siempre ganar, pero la verdad es que no. A veces tenemos que perder y sufrir lo que un día, sin querer  hicimos a otra persona. La vida nos enseña que a pesar de todos estos anti bajos  debemos seguir y aprender a tener humildad y mucha bondad, porque  a pesar de todo creer en un Dios, un ente superior, que nunca nos abandonara aun cuando estemos enfadados con él.

El juego de la vida es apostar a ganar, a derrotar, a llorar, a levantarse, a perder y sobre todo a vencer, aunque a veces nuestro camino es más que difícil son pruebas que tenemos que sobrellevar para la plenitud de una vida mejor, para saber lo que realmente es vivir y así llegar a un estado donde la felicidad será real y para siempre, de cada caída se aprende a como no caerse luego, de cada lagrima a como contenerlas, de cada perdida a cómo superarla  y de cada vencida a como disfrutarla y sacar más cosas para vencer una próxima vez. Cada día jugamos, apostamos a tener un día excelente o uno no muy excelente, dependiendo de la expectativa de la persona. No todos los días serán iguales, pero tú puedes hacer la diferencia, claro hay excepciones, pero la idea  no es que te estanques, si tienes que si quieres llorar hazlo, si quieres gritar hazlo, si quieres abrazar a alguien hazlo aunque no sepa por qué, si quieres correr no te detengas y hazlo ahora mismo, por que jugamos a ganar y no a perder, no querrás en un futuro arrepentirte de haber tenido la oportunidad de desahogarte y no haberlo hecho, sino que por el contrario te sumergiste en el lago de tus recuerdos más infames y te ahogaste, y sabes que título lleva esa situación:  el perdedor ahogado. 

Recuerda vencer es tu meta, perder una opción y salir adelante tu decisión. No importa que edad tengas, que color de piel eres, a que comunidad estés  vinculado, si vives eres un ser humano, pero si decides eres un humano superior  a los demás, a esos que te rodean pero no quieren ni saber que son, ni adonde irán, a  esos que solo viven el día a día con lo que tienen, a esos conformistas que muchas veces solo quieren hacerte caer, pisotearte y dañarte tu propia vida. No los sigas lucha por lo que quieres tener y ser, y no por lo que los demás te impongan.  Lucha por ser tú.