Vida de telenovela, Prologo
Prologo
Querido
Declan:
Lo único
que siempre quise fue ser feliz, formar un hogar con la persona a la que quería,
llenarlo de amor y cariños; enorgullecer a mi familia y sacar la cara por ellos
demostrándole que uno en la vida llega
hasta donde uno se vea, y creo que logre
todo lo que quise o tal vez no, me falto algo, me falto mi familia, con mi
esposo a mi lado, con hijos a los que lleve a jugar al parque, con un perro que
sea el consentido de todos, menos de mí.
Bueno la cuestión es que disfrute tanto logrando lo que quería y haciendo
tantas cosas que un adolescente de mi edad que en la época de mis padres nunca
se hubieran imaginado y creo, que hubiese sido mejor nacer en esa época que en esta, donde mi vida ya no es tan satisfactoria,
donde siento que a cada segundo se desvanece una parte de mí. Pensaba que era feliz,
pero estaba equivocado tanto que ahora me arrepiento de todo, como podrás darte
cuenta apenas tengo veinte y nueve años de edad, y no estoy loco, pues ya he
ido al psicólogo y al psiquiatra, y todos dicen que solo me hago ideas en la cabeza
que vivo en un mundo que yo cree, por ver la televisión, y puede ser real cada
cosa que yo hago, cada enemigo que tengo, cada situación que se me da la quisiera
escribir porque es como si mi vida diaria estuviera en la pantalla con gran sintonía,
y me pusieran difíciles y a veces pocos momentos de felicidad en al que
quisiera seguir luchando y otra en las que por daños que me han provocado
quisiera vengarme de todos, demostrando fuerza y que soy una persona difícil de
hacer caer, que soy como un roble de acero.
Tu sabes
muy bien que desde que te conocí me agradaste y fuimos muy buenos amigos, digo
fuimos por que esta será la última vez que sepas algo de mí, porque la próxima solo
me veras en la ciudad de los muertos, es una decisión tomada. Te quise tanto y confió
tanto en ti, que quisiera que mi historia fuera contada tal y como yo te lo dije algún día, no quiero servir de
ejemplo pues sé que no estaría bien porque para eso nunca serví, solo quiero que
hagas de mi vida la novela que siempre fue, esa que siempre te gusto, cuando caí,
cuando me levante, cuando llore, cuando murieron esas personas a las que un día
llame amigos. Como sabes estoy solo en este mundo mis padres me dieron la
espalda, con mis hermanos y con el resto de mi familia paterna y materna nunca
me la lleve bien, y fueron contados con los dedos de mi mano quienes eran mis
amigos, porque como sabes en mi historia reino la hipocresía, la envidia y la
soledad.
También
te pido que no te vayas por el mismo camino en el que yo me fui, yo te he
aconsejado, porque más que aparte de ser un amigo fiel, fuiste un hermano para mí
y te quiero más de lo que puedo querer, saluda a Miller, Andrés y Bairon de mi
parte, tú los conoces ellos no son de acá, pero cuando te comuniques con ellos,
diles que siempre los extrañe, que nunca deje de pensar en los momentos tan
buenos que disfrutamos juntos, esas noches en al que toda la ciudad de Popayán temblada
cuando caminábamos por la calle, también quiero que mi entierro sea lo más
sencillo posible, nunca le vayas decir
que paso conmigo al menos que te pregunten, porque será con el paso del tiempo
que entenderán que los amigos son muy
contados y siempre querrán saber de uno, como yo me preocupe por ellos y los
ayude en lo que más pude, aunque ellos nunca hicieron lo mismo por mí, como ya
sabes fueron muchos con lo que salía, pero pocos en los que confiaba. Por ultimo
quiero que sepas que me voy muy feliz de haberte conocido, feliz porque se que uno
llega más allá de los limites inimaginables, más allá de ser solo un soñador,
porque el que sueña alcanza.
Nos siendo
más y para no repetir lo mismo en cada párrafo te dejo, en la mesa de noche que
está en mi cuarto bajo llave, están mis diarios, nunca te dije nada pero cada día
escribía lo que me había pasado y lo que había hecho, lo que ya te había contado
y lo que nunca te dije. Espero le saques
buen provecho a esta historia que más que ser mi vida es un melodrama.
Con cariño
tu gran amigo Eric….
Nota: esta fue la carta que me
dejo un amigo al que nunca voy a olvidar, porque personas como el, hicieron de
mi vida la más feliz, una vida libre de prejuicios, en la que me desenvolví con
madurez siendo un niñito de casa, un sobre-protegido amado por mi familia de esa
manera, de donde tuve que salir y encontrarme con un mundo diferente al que me habían
enseñado, un mundo donde la falsedad,
los caminos pecaminosos y la falta de conciencia a la hora de hacer algo
reinaba. El me enseñó a nunca, desistir a seguir firme hasta alcanzar lo que me proponga, porque el único
límite que existe en la vida somos nosotros mismos, como leí alguna vez en un
libro que fui muy importante para mí; ´´si lo vez en tu mente lo tendrás en tus
manos.´´
Mi querido
amigo después de haberse tomado treinta somníferos, nunca volvió a despertar,
su vida a veces parecía una normal sin nada de acción y otras veces parecía una telenovela de
terror, misterio, drama, romance y comedia, donde el hacía solo muchos papeles,
el protagonista, el villano, la víctima, y muchos más que lo hicieron grande. Su
historia apenas será un pequeño homenaje para lo que realmente se merece, y
no es que justifique el suicidio ni más
faltaba, pero lo hago como un ser agradecido por todo lo que me enseño y me
aconsejo y también para cumplir con su última voluntad.
Su ´´vida
de telenovela´´ como el la llamaba siempre giro entorno a algo, el querer vivir con su propia
familia, y tener un final feliz, pero pasaron muchas cosas y él, aunque era muy
joven no vio que su vida apenas comenzaba, termino con su único sueño que lo
hubiera hecho feliz.
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